Crisis en el Limarí por Mosca de la Fruta: lo que no ha salido en los medios

Monte Patria
Monte Patria | Foto: Cedida

Imagina que te desempeñas como agricultor en Tulahuén, con tus árboles rebosantes de mandarinas dulces, pero una plaga de moscas frutales (sí, la temida Ceratitis capitata) te tiene las manos atadas. No puedes comercializar, no puedes trasladar tu fruta, y sobre todo, nadie te ha proporcionado una respuesta precisa. Esto es lo que muchos productores en la región de Coquimbo están experimentando, y hoy te revelamos qué sucede y cómo se está manejando esta crisis.

El Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) se encuentra trabajando en terreno, sin embargo, no todos los agricultores perciben la ayuda en el momento adecuado. En zonas tales como Tulahuén, Las Ramadas, San Clemente, Fundina, e incluso en Vegas Sur en La Serena, el SAG ha implementado nueve campañas para luchar contra esta plaga. Entre los métodos implementados se encuentran: eliminar la fruta de los árboles, tratar el suelo, poner trampas y mantener un seguimiento continuo en un radio de 200 metros desde los lugares donde se identificó la mosca. Además, existen áreas más extensas, de hasta 7,2 kilómetros, en las que se regula el desplazamiento de frutas para prevenir la propagación de la plaga.

Sin embargo, aquí surge el inconveniente: numerosos agricultores, como Ricardo Villanueva, un productor de Tulahuén, afirman que si se encuentran más allá de esos 200 metros de acción directa los protocolos no se activan con la misma intensidad. Por ejemplo, Ricardo cuenta con 4.000 kilogramos de mandarinas que no puede vender ni desechar, y desconoce si algún día obtendrá ayuda.

Seguro agrícola en espera por crisis de la mosca de la fruta

El gobierno ha propuesto un seguro agrícola para apoyar a los agricultores, sin embargo, la situación no ha sido tan rápida. De acuerdo con Christian Álvarez, el seremi de Agricultura, para el Diario El Día, este seguro se encuentra en proceso y podría favorecer a aproximadamente 110 o 120 agricultores. No obstante, existen áreas como Río Hurtado que no están abarcadas por este programa, dejando a muchos sin respaldo. Para estas situaciones, se está solicitando apoyo al gobierno regional, pero todavía no se han obtenido respuestas específicas.

Asimismo, los agricultores requieren de un certificado de pérdida que el SAG todavía no ha proporcionado. Esto implica más tiempo de espera, más dudas y, para muchos, más pérdidas.

El escenario es tan complejo que el diputado Víctor Pino ha demandando soluciones inmediatas. Afirma que hay agricultores que han perdido hasta el 80% de su cosecha, con millones de kilogramos de frutas en cuarentena o destruidos. Aquello no solo repercute en las familias de los agricultores, sino que amenaza la economía de toda la provincia. "Cada día sin acción es un día más de daño", afirma Pino, y los agricultores concuerdan.

En tanto, el SAG promete continuar contactándose con los productores de forma gradual y está desarrollando un control de tráfico 24/7 en Monte Patria para impedir la circulación de frutas contaminadas. Sin embargo, para los agricultores, el clima es adverso. La mosca de la fruta no aguarda, y cada día que transcurre implica más pérdida de fruta y menos ganancias para las familias que se sustentan de este medio.